Feisbuc

El Facebook está reemplazando mi interés a la hora de sentarme ante una pantalla de ordenador, en perjuicio del hábito anterior de penetrar en blogs o vagar por la red en búsquedas azarosas y diversas. De un modo infantil, colorido, repleto de iconos y signos,  la red social de redes me muestra en retahila qué pasa por la cabeza, intención y vidas de mis amigos agregados. El voyeur que algunos llevamos dentro satisface al exhibicionista que otros sacan afuera, de forma que puedes pasarte las horas muertas saltando de perfil en perfil, cual Tarzán con las lianas, hasta otear vidas más que ajenas que no te pillan ni de cerca, amigas de amigos de tus amigas, descubriendo de forma superficial en qué carallo está cada quién y de qué parida se ha hecho fan fulanito recientemente.

El caso es, como me comentaba alguien hace poco, que de alguna forma esta costumbre general está empezando a sustituir el relato oral de tus últimas noticias, de forma que cuando un grupo de amigos-facebook se junta a lo mejor ya no ven necesario narrar los pormenores del último viaje al Nepal, de la reciente merienda campestre o de lo crecido que está el niño, porque todo dios ya lo ha visto en fotos, como si hubiera participado de ello en vivo y en directo. Le quita suspense a la cosa, la simplifica. O la agiliza, así ya vas más al grano.

Paradojicamente, (dicho sea esto para los no iniciados en el juego) ser amigo de Feisbuc no representa absolutamente nada. Hay gente que tienes agregada como amigo y que si te la cruzas por la calle a lo mejor ni te saluda. Tener setenta o quinientos amigos no implica que tu vida social sea necesariamente intensa o agitada, porque la amistad en estos pagos se vende barata, y puede darse (se da, sin duda) el caso de que luego no tengas con quién tomarte un café el fin de semana o un hombro sobre el que llorar cuando el cuerpo te pide hacerlo. Pero ahí estamos muchos, y cada vez más enganchados, hasta el punto de  hacer bueno el credo urbanita y global  (Facebook, ergo sum), de que quien no está en Feisbuc, casi puede estar seguro de que no existe. O al menos eso creeremos el resto de los afiliados y adictos confesos.

Así que si queréis saber qué fué de mí las últimas semanas o meses, en qué estoy pensando, si me van bien las cosas, si estoy feliz o al menos lo parezco, quién soy yo, en definitiva, a día de hoy, nada de mirar el blog, filosófico, retórico, y obsoleto: entrad en mi perfil de la red social. Veréis a quién frecuento, a quién admiro, a quién y qué comento, qué cara llevaba en mi última borrachera, a quién me abrazaba. Si canto o bailo, mi sentido del humor,  la música que escucho, mi compromiso con causas varias, los autores que idolatro. De todo quedará registro, que se puede supervisar e indagar. La privacidad, a la vista de una forma impúdica. Y qué más da. Que nos vean, que nos miren, que nos comenten, que lo sepan todo de nosotros. Hasta donde yo sé, todos estamos encantados.

Y que te quede claro: yo también visito tu perfil (compulsivamente) cuando te echo de menos.

 

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15 respuestas a Feisbuc

  1. Atticus dijo:

    Será por eso, Fer, por lo que no tengo «perfil». De hecho sólo doy bien de frente y aún mejor de espaldas. Tal vez también por lo que dices: porque me gusta la filosofía, la poesía, la comida, el amor. Todo actividades lentas.

    Cada cual puede hacer con su vida y relaciones lo que quiera… hasta cierto punto. Nadie tiene derecho a publicar fotos de otro en su página. Y comienzo estar hasta los estreptococos de tener que advertir a estos feisbuquianos de que no les doy permiso para publicar fotos en las que aparezca yo. Y me miran alucinados. Pues no, si te quieres exhibir te pones en pelota picada al frente de una manifestación.

    Vale poco una amistad… Disculpad, adictos, pero qué estupidez. Yo no osaría preguntarle a alguien si me acepta como amigo. Si es que sí, aumenta el número de amigos (?) exponencialmente, es decir, se abarata, se banaliza. Si es que no, ¿estamos dispuestos a recibir rechazos y ninguneos? Por higiene verbal, necesitamos otra palabra.

    Voy a hacerme una página de éstas para acoger a los que no quieren tener una página como ésta. Será la paradoja del bucle feisbuquiano, el club que no aceptaría a alguien como yo del que, no obstante, soy presidente.

    No, mejor me voy a mi blog. Tengo q

  2. Atticus dijo:

    Tengo que pensar despacio. Necesito un café, tiempo lento, alguien con quien hablar, unos ojos, el aroma de la piel, la cadencia de la respiración.

    (Perdonad el abrupto final anterior, me equivoqué de tecla).

  3. Yo no tengo feisbuc 🙂 , el movil lo uso poquito y normalmente está off, mis pocos amigos lo saben y sí, me dicen que soy rara… Jajaja… Atticus, apúntame en tu club!! Jajajaja… 🙂

  4. Fer dijo:

    No creo que haya que entrar en el debate «ser o no ser» de feisbuc, el ser o la nada, o estás conmigo o estás contra mí. Hace unos cuantos años ya pasaba con la llegada de internet, con el chat, con los móviles, con el correo electrónico, y muchos años atrás con la televisión, la tele por cable, el dvd … y finalmente todos o casi todos hemos sucumbido al «progreso»(?). Es como la cuestión que planteaba Signos sobre los libros electrónicos frente al olor del papel, el tacto de las páginas y la letra impresa en tinta. ¿Qué es mejor, qué es peor?¿Seguimos siendo románticamente clásicos a costa de cargarnos los árboles del Amazonas? (dicho sea esto en total hipérbole) ¿ceder a los avances que se nos van imponiendo, o mantener nuestra identidad a riesgo de quedar fuera de algunas novedades?

    Yo lo descubrí hace un año o así, para compartir unas fotos de unas óperas con un grupo de amigos. Le he encontrado cierta utilidad en ocasiones, he podido aficionarme a algunas de sus opciones, y me abro con curiosidad a sus posibilidades. No creo que supla los encantos de ningún encuentro humano «en vivo».

    En cualquier caso, el post está planteado con ironía y distancia. Soy un usuario común, no un adicto. Mi mayor respeto, Atticus, compañero, para los que os resistís a penetrar en red social alguna. Aún hay redes en las que quedar atrapado más apasionantes que las cibernéticas.

    Bienvenida a este blog, ClothoBoBardi. Te he leído tanto en tus intervenciones en Criscractal y Nómadas Square como en tu blog propio, que me parece brillante, polifacético, y de una sensibilidad cautivadora (aunque no he dejado aún ningún comentario). Cuando creéis ambos en Facebook la página de personas que no quieren tener Facebook me haré fan. Soy fan de hacerme fan de todo 😉

  5. CrisC dijo:

    “Aquella noche, más hermosa que cualquier otra, pudimos, efectivamente, llorar. Pasaban mujeres que nos tendían la mano, ofreciéndonos el ramillete de su sonrisa”.

    Breton & Soupault, en “Los campos magnéticos”.

  6. CrisC dijo:

    ¿Que mi comentario está pendiente de moderación? ¿Lo cuáloqué?

  7. Fer dijo:

    Estaba pendiente de moderación porque has cambiado de nick al entrar aquí (hasta ahora entrabas con CrisCrac y la autorización era automática). Estos sistemas son inteligentes hasta cierto punto.
    La frase, hermosa. Y aunque no acabo de ver la conexión con el tema del post, se agradece una cita de esa altura.

    • CrisC dijo:

      Ví la conexión íntima cuando copié los versos, pero ahora no me acuerdo. Igual estaba bajo los efectos, o era «a men under the influence».

      Espero que mi nuevo nick ya sea fetén en tiempo y forma.

  8. paraqueloleas dijo:

    ¿conoces «que vida más triste»? Ahí va un enlace, se titula «Mi vida a lo Facebook».

  9. Atticus dijo:

    Bueno, Fer, el enlace que manda «paraqueloleas» es, definitivamente, definitivo. Me dan ganas de llamar de verdad, comprobar si la piel tiene la textura y la temperatura que recuerdo. Si las personas dudan, se irritan, se emocionan y palpitan en eso que llamamos conversación.

    Me gusta.

    Y no pienso ser el seguidor 43.6774 de los que miran por la ventana y dicen «Este año no va a llegar nunca el buen tiempo».

  10. Fer dijo:

    A Fer le gusta esto.
    Fer se ha unido al grupo «Señores que aún prefieren una charla con seres humanos cara a cara que a través de Facebook».
    Fer se ha hecho fan de «Buenos amigos que hacen comentarios en mi blog».
    Fer, Atticus, CrisC, ClothoBoBardi, Paraqueloleas y otros más son ahora amigos.
    😉

  11. Jajajaja… Me he reído un montón con el video!! Jajajaja… Yo me he hecho fan de vuestros blogs… Jajajaja… Y… Uyuyuyuyuy…. Hora de cenar!!… También me hago fan de los huevos fritos… Jajajaja…

  12. Amiga 3.4527 dijo:

    Fer…. Me gustas

  13. Fer dijo:

    A Fer le gusta esto…

  14. Atticus dijo:

    A mí me gusta que a la amiga 3.4527 se haga amiga de Fer. ¿Me aceptas como amigo? ¿Eres «miembra» del grupo de números raros? ¿Puedo apuntarme? ¿Me aceptas en ese grupo? ¿Quiero pertenecer a un grupo que acepta gente como yo? ¿A Fer le gusta que yo quiera pertenecer a un grupo en el que puedo apuntarme si me acepta como amigo la amiga que le gusta a la que Fer le gusta si puedo apuntarme si me acepta como amigo la que pertenece al club de las mujeres que se ponen bolsas de plástico en la cabeza o a las daminificadas por las expectativas de Brad Pitt que tiene entre sus miembros a una amiga que me ha invitado a ser su amigo pero que no he aceptado porque no tengo perfil sino frente pero tampoco porque nadie me acepta de frente sino de espaldas que es como le gusta a una amiga que no es esa amiga que le gusta a Fer…?

    ¿Me he perdido? ¿Estoy en un bucle? ¿Es un nuevo grupo? ¿Puedo pertenecer? ¿Me aceptas como amigo?…

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